Hoy he llegado a Barcelona para comer y hacer tiempo hasta las 18:30, que es la hora de embarque para el Ferry nocturno que me llevará a Civitavecchia, con una escala en Porto Torres (Cerdeña). Civitavecchia está a solo 70 km de Roma y, al no ser una ciudad costera, es su puerto "de facto".
El trayecto hasta Barcelona por la A2 ha sido aburrido y sin incidentes, excepto por un nuevo radar de tramo que han instalado antes de los túneles del Bruc sin poner mucha señalización y que creo que me ha cazado (lo comprobaremos a la vuelta). No tiene sentido en esa zona -por mucha curva que haya- limitar la velocidad a 80 km/h durante varios Km (sobre todo con la cantidad de camiones que hay). Otro radar que está solo para recaudar. En fin...
Barcelona a finales de Julio os la podeis imaginar: hasta arriba de turistas y mucho trafico, calor y humedad. Menos mal que solo he estado unas pocas horas. Debe de ser la ciudad española por la que mas veces he pasado (a coger ferries principalmente) y que proporcionalmente menos he visitado turisticamente hablando -aunque me la conozco relativamente bien-.
Para los curiosos: el ferry Barcelona-Civitavecchia de la naviera Grimaldi, con escala corta en Porto Torres (Cerdeña), 22:15 horas de trayecto total (de 20:30h a 18:45h), una moto y una persona -sin camarote- cuesta 100€ (con descuento por compra anticipada). Bastante mas barato que la gasolina que hubiera gastado yendo hasta Roma por carretera (y eso sin contar el ahorro en tiempo, cansancio, y alojamiento).
En la foto: la torre de la basílica de Santa María del Mar vista desde un callejón del barrio Gótico de Barcelona:
